lunes, 12 de marzo de 2012

Teorìa Incorrecta



Digan lo que digan, el lugar común (¿sentido común?) de un empresario es buscar monopolizar el mercado…¿Qué empresario no quiere llegar a ser un pedazo de la torta de, mas o menos..360 grados?
Mi abuelo construyò su mini fortuna, logrando ser el único que traìa ciertos repuestos para maquinarias industriales. Y ese pequeño monopolio, fue su solidez de hombre sobreviviente de una postguerra siniestra.
Sebastiàn Piñera, un empresario multimillonario, constructor poderoso de negocios gigantes, conoce bien la tranquilidad del “faraonismo del mercado liberal”. Pero ahora es presidente, un presidente de centro derecha y..què fascinante cruza genética. La destreza del modelo empresarial (para alguien tan consolidado, probablemente sea ya pensamiento personal)concretamente implantada en el estado social, de un país con grandes desigualdades.
Pero esta vez, el éxito està medido por las varas psico-emocionales del negocio de todos. Aquí hay que hacer grandes ganancias para todos a la vez.
A ver, en lenguaje sencillo:
Un capo del arte de ganar dinero, decide industrializar la artesanìa de la justicia social y darle status de empresa.
No, no, vamos por un segundo intento:
Un hombre con el mundo a sus pies, decide entrar sin zapatos, al templo de los desposeídos y descubre que, es de tierra húmeda yque no tiene alcantarillado.
Son dos grandes transformaciones, la del hombre y la del Estado.
La teoría es asi:
Como empresario hiper-exitoso ha incorporado la “orgánica” de querer hegemonizar para ganar màs. Como presidente de derecha no debe, no corresponde querer un estado màs grande y expansivo, uno que monopolice algunas cosas. Al contrario (¡!) el estado debiera ser un proveedor externo, de los modelos de desarrollo de mercado…
Pero amiguitos..todo esto, ocurre al interior de un ser humano, y ese ser humano, està de intercambio en el servicio público..el laboratorio, también es emocional.
“A veces hay que controlar el mercado para ganar” - puede estar diciéndole su corazón que, esta vez, habla de ganar para todos. Pero al interior de los aliados políticos con los que ganó, eso suena a izqueirdismo.
-“Mas ortodoxia” le pide Novoa pero ¿Serà falta de ortodoxia querer darle algunos controles definitivos al Estado sobre el Mercado? ¿Lo será para un corazón empresarial?
Al final nos estamos fundiendo. El hombre volverá de su intercambio transformado, pero ¿Habrá tambièn hecho transformaciones? Demostraciones necesarias, evidencias de que, aplicar los principios con que(habitualmente) se enriquecen unos pocos en el negocio de todos; no es faltar a la ideologìa sino compartir la destreza. Trabajar para que, las diferencias de acceso mìnimo y supervivencia se acaben.
Y asi el aislamiento de los unos y los otros, las rejas que separan al que tiene de màs (y tanto que acapara sin saber) del que no encuentra como tener lo bàsico, se abran y los jardines sean reposo y esparcimiento de todos. Lugares de encuentro.